La Fiscalía General de la República ha confirmado que Ismael 'El Mayo' Zambada tenía razón cuando aseguró que Héctor Melesio Cuén,...
La Fiscalía General de la República ha confirmado que Ismael 'El Mayo' Zambada tenía razón cuando aseguró que Héctor Melesio Cuén, exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, fue asesinado en la finca donde lo secuestraron, y no en una gasolinera, como originalmente había informado la Fiscalía de Sinaloa.
Esta confirmación refuerza lo que Zambada declaró en una carta presentada por su abogado a las autoridades de Estados Unidos, lo que implica que Guzmán Jr. engañó a Zambada para facilitar su extradición ilegal. Si la Fiscalía General de la República respalda las declaraciones de Zambada, esto podría tener un fuerte impacto en Morena, ya que también mencionó en su carta que en la reunión entre él y Cuén estaba presente el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, quien ha negado consistentemente haber asistido y alegado estar en Estados Unidos en ese momento. Sin embargo, no hay pruebas que respalden esta afirmación del gobernador. Todo indica que Rocha Moya sí estuvo en dicha reunión y que, en consecuencia, las versiones de su inminente solicitud de licencia tienen fundamento.
Resulta sorprendente que la Fiscalía General de la República le dé la razón a Zambada, ya que esto sugiere no solo un montaje por parte de la Fiscalía de Sinaloa, sino también una posible operación para proteger al gobernador. Es relevante también que las Fiscalías de Sonora y la General, ambos órganos bajo control de Morena, se encuentren en esta situación, lo que complica la posición de Rocha Moya.
Todo esto llama la atención por la cercanía entre Rubén Rocha Moya y el expresidente Andrés Manuel López Obrador, quienes tienen una relación más que amistosa. La presión sobre la Fiscalía General debe ser intensa, pues sus decisiones no solo debilitan la versión del gobernador, sino también los esfuerzos de López Obrador y la actual presidenta, Claudia Sheinbaum, por respaldar a Rocha Moya, descrito como un protector del narcotráfico.
Este caso también expone la gravedad del intento de encubrir el asesinato de Cuén, trasladándolo de la finca donde ocurrió al escenario falso de una gasolinera, lo cual revela una operación estatal para proteger a Zambada y, por extensión, al gobernador de Sinaloa.
El respaldo de la Fiscalía a las afirmaciones de Zambada confirma lo que muchos han señalado durante años: el poder está protegiendo al narcotráfico. Este respaldo debilita al gobierno de Sonora y a la credibilidad de su Fiscalía, al punto que el fiscal debería considerar renunciar.
La carta de Zambada ahora cobra mayor relevancia justo cuando está por iniciar su juicio en Nueva York. Si bien es improbable que Zambada enfrente la pena de muerte, el juicio promete revelar detalles sobre los acuerdos entre autoridades y narcotraficantes para mantener el control en la región, con implicaciones significativas para el futuro político de Sinaloa y la estabilidad de Morena y consecuencias legales y políticas de gran alcance.