México fue traicionado. Y la forma en la que Morena operó la traición es, de verdad, de miedo. Auténticamente de gángsters, de mafia. Ni s...
México fue traicionado. Y la forma en la que Morena operó la traición es, de verdad, de miedo. Auténticamente de gángsters, de mafia. Ni siquiera Mario Puzo se pudo haber imaginado una cadena de traiciones como la que nos regaló el Senado de la República y que obviamente ahora sí, ya a toro pasado y ya varias horas después de ver el panorama completo una y otra vez, pues saltan a la vista.
Sabemos perfectamente que los Yunes le dieron al final del día el voto a favor a Morena para sacar la reforma judicial traicionando al Partido Acción Nacional, pero es claro que los guindas no confiaban nada en los Yunes (¿por qué será?). Y obviamente tenían su Plan B en el senador campechano Daniel Barreda, de Movimiento Ciudadano que se ausentó de la de la sesión.
En el caso de que supuestamente los Yunes hubieran votado en contra de la reforma, el hecho de que no existiera otro senador de oposición igual les daba el gane.
Daniel Barrera no se presentó a la sesión porque en un principio, cuando recién estaban haciéndose los trabajos para la sesión, se decía que había sido retenido de manera ilegal, que estaba desaparecido. Incluso hubo quienes afirmaron que había sido secuestrado porque no contestaba el teléfono, estaba ilocalizable, su familia no sabía absolutamente nada. Algunos senadores de su propia bancada dijeron ‘nos lo secuestraron’.
Pero luego el propio senador Barreda, fresco como una lechuga, dio a conocer que no tuvo más remedio que ausentarse de la sesión "porque tuvo que acompañar a su papá a un trámite judicial”...
El coordinador de los de los Naranjas, Clemente Castañeda, la senadora Amalia García, Alejandra Barrales y hasta el propio Luis Donaldo Colosio se quedaron con cara de ¡¿QUÉ?!... ¡¿CÓMO?! y todavía no entienden cómo encontrarle la cuadratura a ese círculo.
El único que pudo haber negociado una marranada de este calibre tendría que haber sido, necesaria y forzosamente, Dante Delgado, el eterno dirigente del partido Movimiento Ciudadano que, si así sucedió, tendría que haber negociado directamente con Adán Augusto, el jefe de los senadores morenistas, para que sucediera la ausencia de Daniel Barreda dándole cauce a la aprobación de la reforma judicial.
Insisto, en el caso de que los Yunes traicionaran a Morena (¿porque sospecharían eso?).
Uno se pregunta ¿qué carajos podría haber ganado Movimiento Ciudadano con una cochinada de este calibre?.
Hay dos escenarios.
- El improbable: inmunidad para un auténtico pájaro de cuentas que tiene en sus filas, Eliseo Fernández Montufar, senador titular por Campeche y prófugo de la justicia por Desvío de recursos, Enriquecimiento inexplicable y Homicidio.
- El certero: la gubernatura de Jalisco y la Alcaldía de Guadalajara, pues Morena pretende quitarle a Movimiento Ciudadano ese triunfo a través de una impugnación en el Tribunal Electoral.
En estos días se tiene que resolver este asunto.
Si el Tribunal Federal Electoral falla a favor de Movimiento Ciudadano en Jalisco y en Guadalajara, ¿qué más explicación quiere usted?
Si camina como ganso, tiene patas de ganso, plumas de ganso y pico de ganso...
En el país donde las traiciones a la gente se dan cada día y a cada momento, suena bastante lógico que la dirigencia de Movimiento Ciudadano le haya alquilado la cola a Morena a cambio de un estado y de una de las alcaldías más importantes de México.
Y lo vamos a corroborar en próximos días.
